miércoles, diciembre 27, 2006

Un capitalista conservador pragmático

“Si como fabuladores de doctrinas políticas los comunistas fueron tenazmente insuperables, sus poetas, por lo general, o resultaron malos o no fueron tan comunistas”

Este párrafo apareció en el diario Perfil del domingo 24 de diciembre bajo el título de “Un comunista lúdico” y firmado por Juan Terranova.

Releyendo este párrafo tomé nota de todo lo que afirma el señor Terranova, a saber:
• El comunismo no es una doctrina política sino tan solo una fábula
• Aún así fueron insuperables sólo tenazmente, es decir, insistieron, insistieron e insistieron tanto que alguien finalmente dijo: “está bien, fabulando son insuperables”.
• Descalifica a los poetas comunistas pero, por si acaso uno recuerda a Gorki o a Pablo Neruda, se ataja agregando la frase “por lo general”.
• Finalmente, para darle ese toque de credibilidad indispensable en estos casos, se autodefine como un “Comunista lúdico” por lo que habrá que creer lo que dice.

No sólo es evidente que Terranova dedicó muchas horas escribiendo y reescribiendo este párrafo repleto de intencionalidad, sino que también es claro que no es ni comunista ni lúdico. Más bien parece ser un capitalista conservador y pragmático.

No pude encontrar la nota en la edición digital del diario.

martes, diciembre 26, 2006

Hay un hongo en mi jardín

En el jardín de mi casa creció un hongo de esos que se cuentan uno por uno...

jueves, diciembre 21, 2006

Modelos argentinas y el Photoshop



Corregir fotos no es algo nuevo, pero ahora parece que se convirtió en una condición. Así lo cuentan dos fotógrafos en una nota publicada en Página 12.

Hasta el día de hoy no escuché a ningún “famoso” hablar en contra de esta práctica. Pero una cosa es retocar una foto para corregir un error y otra cosa muy diferente es cuando ya las modelos parecen dibujos tal como se ve en algunas campañas gráficas. Y ni que hablar en las revistas donde aparecen con poca o nada de ropa.

Me parece que existen dos posibilidades para el futuro cercano. La primera es que surja algún tipo de reacción retro y comience cierto deseo de volver a lo natural o, lo que para mí es más probable, que en algún momento comiencen a aparecer publicidades donde se usen modelos 3D completamente creadas por computadora usando, entre otros programas, el Photoshop.

Me pregunto si las modelos seguirán amando dicho programa de computadora cuando vean esfumarse posibilidades comerciales en manos de modelos virtuales.

lunes, diciembre 18, 2006

Cocoliche

La palabra cocoliche, usada para denominar la forma de hablar de muchos inmigrantes italianos, se origina en los espectáculos teatrales y circenses de la compañía de los hermanos Podestá. El personaje apodado Cocoliche –cuyo lenguaje era una síntesis desopilante del habla de los napolitanos, genoveses, compadritos y gauchos– causaba sensación entre los espectadores, motivo por el que se convirtió en un elemento infaltable en los sainetes.

Se dice que, para su creación, José Podestá se inspiró en un peón de circo llamado Francesco Cocoliccio, que hablaba fingiendo ser un compadrito argentino.

Un parlamento típico es: “Mi quiamo Franchisque Cocoliche, e songo cregollo gasta lo güese de la taba e la canilla de lo caracuse, amiche”.

El sainete criollo, Cantaro, 2003

jueves, diciembre 14, 2006

Lunfardo


Aberastury le explica a Don Antonio, inmigrante italiano, como hacer para conseguir el amor de una señorita:

Aberasturi: –La cata a ella…
o no bien la vea pasar
le bate de esta manera…
¡Che, fulana, parate áhi!
Y en cuanto ella se detenga,
usté se le acerca y le hace
este chamuyo a la oreja…
Papirusa, yo te “roequi”.

Don Antonio: –¿Yo te qué?

Aberastury: –¡No sea palmera!...
Yo te “roequi” es “yo te quiero” al revés…

Don Antonio: –¡Ah! ¡Que riqueza
de odioma!... ¡Cuando no alcanza
hasta te lo danno vuelta!...
¡Assasino de Quevedo
o Cervantes de Saavedra!...

Alberto Vacarezza, Tu cuna fue un conventillo,
Obra de teatro estrenada en 1920

miércoles, diciembre 13, 2006

Revelación solitaria


Ahora que había empezado a alejarse comprendió con claridad Grenouille que aquel denso caldo humano le había oprimido como un aire de tormenta durante dieciocho años. Siempre había creído que era del mundo en general de lo que tenía que apartarse, pero ahora veía que no se trataba del mundo, sino de los seres humanos. Al parecer, en el mundo, en el mundo sin hombres, la vida era soportable.
Patrick Süskind, El Perfume, 1985

lunes, diciembre 11, 2006

Me cayó la ficha


Durante bastante tiempo evité comprar ropa ya que, como era de suponer, debía adelgazar algunos kilos y, entonces, necesitaría volver a comprar ropa acorde a mi contextura física normal.

La revelación me llegó en cuotas. Como piezas de rompecabezas fueron encajando hasta formar la figura completa. A4delgacé un poco lo cual me hizo sentir mejor, pero el resultado no fue el esperado. El comentario de mi mujer diciendo que estaba bien de peso lo tomé como algo poco objetivo. La pieza final llegó con mi suegra.

-Che, ¡estás flaco!- dijo.
-Bajé unos kilos, pero flaco no estoy- respondí.
-Bueno, flaco flaco no vas a estar más…- sentenció con un puñal que se abrió paso a través de mi alma.

Al fin comprendí que no soy un pibe de treinta excedido de peso. Más bien soy un tipo de cuarenta en su peso normal.

miércoles, diciembre 06, 2006

Justicia Argentina

Que los jueces no imparten justicia sino que aplican las leyes es algo que puedo entender. Que la “justicia” como institución no tiene por qué ser “justa” sino garantizar el estado de derecho me cuesta un poco más, pero bueno.

Lo que me llama la atención de la justicia en Argentina es que rompe con una característica que se repite en todas las épocas en todos los lugares y es que es comparativa. De esta forma cuanto más grave es el delito más grave es la pena.

Para mí, matar es el peor delito que se puede cometer y matar a mucha gente es mucho peor. Desde el momento en que hay genocidas libres toda nueva comparación de la justicia queda invalidada.

Es por esto que realmente no me sorprende que un juez determine que lo de Río Tercero fue un accidente y que sobreseyó a todos los militares acusados ni que otro juez entienda que la vida de una nena vale menos por tener síndrome de Down

Según Platón, “la justicia no es otra cosa que lo que conviene al más fuerte”.