Por Federico Viggiano
A fines de la década del ’70, cuando el rock progresivo ya comenzaba a agonizar y el Punk y la New Wave se convertían en los nuevos protagonistas de la escena musical, un jóven grupo de Los Angeles llamado TOTO, sacaba su primer disco, de título homónimo.
TOTO era un grupo conformado por seis músicos profesionales y muy experimentados, cuya música no fue el resultado de algo improvisado. A pesar de todos los estilos musicales que se pueden escuchar en este disco, así como en cualquier otro, esto no fue una consecuencia de una indecisión sobre hacia que estilo querían que esté orientado el grupo, sino más bien que el grupo desde un comienzo tuvo una idea clara de cómo quería sonar, y la integración de distintos y variados tipos de música no les quitó personalidad, por el contrario, se convirtió en su rasgo más característico.
El disco comienza con Child’s Anthem, el único tema instrumental del disco, y el único con aires progresivos. Quizá esta sea la canción más emotiva. Luego de un potente comienzo, queda el piano solo haciendo un arpegio sobre el cual otro sintetizador toca una hermosa y melancólica melodía, que luego repite la guitarra, ya con el resto de los instrumentos incorporados a la canción.
Inmediatamente después de estos casi tres minutos progresivos, TOTO muestra su lado más pop con el gran hit “I’ll suply the love”, que sobre el final vuelve a mostrar algunos destellos progresivos con una gran overtura instrumental.
En “Georgy Porgy”, otro de los hits del disco, el grupo mustra su costado más funk, que se vuelve a repetir en “You are the flower”. Aquí aparece como artista invitada una cantante de soul llamada Cheryl Lynn.
El roquero “Hold the line” es un excelente tema, con el riff más recordado de toda la historia de TOTO, y con un sensacional solo de guitarra. Esta canción fue la mayor responsable de que el primer disco de este grupo se convirtiera en un fenómeno de ventas.
Esta fantástica placa se despide con Angela, uno de mis temas favoritos de este grupo Una hermosa canción con piano y voz, con algunos momentos más eléctricos sobre el final.
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